El Pleno del Consell de Mallorca ha aprobado inicialmente el Plan Director Sectorial de Residuos no peligrosos de Mallorca (PDSR). Una de las principales novedades de este plan es que se unifican los actuales dos planos de residuos no peligrosos: el de residuos sólidos urbanos y el de construcción, demolición, voluminosos y neumáticos fuera de uso.
Entre los objetivos y retos más importantes del Plan, y que también supone una gran novedad, es el hecho de afrontar la separación de materia orgánica, implantando la recogida en toda Mallorca en dos años y planificando nuevas infraestructuras de compostaje para poder asumirla.
También se potencia el servicio de los puntos limpios y de las estaciones de transferencia para facilitar y potenciar el establecimiento de una red de instalaciones que permitan potenciar la preparación para la reutilización y las recogidas selectivas minimizando los impactos vinculados al transporte y tratamiento. En el caso de los puntos limpios, el plan prevé que todas dispongan de un espacio para la preparación para la reutilización. Es decir, que cuando los residuos lleguen se elijan aquellos que se puedan reparar para darles un segundo uso y se traten en cuidado.
Instalaciones
Para poder llevar a cabo todos estos objetivos se ha planteado una serie de mejoras en las instalaciones de tratamiento. Por un lado, se planifican nuevas instalaciones, descentralizadas de Son Reus, para hacer compost de materia orgánica y otros por el compuesto de lodos. Y por otro lado, se mejorarán y ampliarán las estaciones de transferencia
El planteamiento que se hace es el de mantener el sistema de gestión insularizada pero con plantas descentralizadas, por lo que acercamos al máximo el tratamiento, sobre todo de materia orgánica, a los municipios. Además, todas las reformas y nuevas instalaciones se realizarán con la mejor tecnología disponible en el momento de la obra, lo que ahora no sucedía porque el Plan anterior especifica la tecnología a utilizar.
Hay que destacar que este planeamiento es hasta 2030 y que por tanto está elaborado por llevarse a cabo en fases, según las necesidades marcadas por la gestión real de los residuos.
Por otra parte, y para dar cobertura al nuevo sistema de separación de envases, el Sistema de Depósito Devolución y Retorno (SDDR), se ha planteado la reserva de suelo para una Planta de lavado de envases, y también se contempla una máquina de conteo para apoyar el sistema.
La propuesta también contempla el cierre de las líneas 1 y 2 en el articulado, basándose en la reducción de toneladas y el aumento de recogida selectiva. Será la Comisión de seguimiento en materia de residuos que hará el seguimiento de objetivos y concretará cuando se hace efectivo el cierre.
Uno de los grandes beneficios territoriales de este PDSR es el aprovechamiento de todo el suelo que ya estaba reservado para hacer uso público, reduciendo la ocupación de suelo adicional. Incluso, se desafecta territorio para que se puedan hacer otros usos. Concretamente, en las plantas de tratamiento de lodos de Ariany y Sa Pobla, esta desafección implica dar respuesta a una demanda vecinal histórica.
Otros beneficios ambientales
Por otra parte, cabe destacar que el PDSR no se contempla la entrada de residuos fuera de las islas Baleares.
Todos estos objetivos están encaminados a respetar la jerarquía de residuos y potenciar un cambio de modelo hacia una economía circular. Dos conceptos encaminados, por otra parte, a seguir las normativas europeas.
En cuanto a la transparencia, habrá un traspaso de datos e información entre instituciones y hacia toda la ciudadanía. Por eso se especifican tres herramientas básicas mínimas: la Comisión de Seguimiento de la gestión de residuos, un visor gratuito para poder ver todos los parámetros que se estudian dentro del programa de medidas y vigilancia ambiental y la página web del Consell de Mallorca donde se colgarán todos los datos de gestión.
Fuente: Retema